Aldea de Tulor
Es uno de los mejores ejemplos de la riqueza histórica y arqueológica del lugar. Tiene vestigios que superan los tres mil años de antigüedad. Es un lugar lleno de ruinas e historias que se encuentran escondidas en cada rincón. La mayor parte de estas ruinas se encuentran cubiertas por la arena del desierto y sólo un 4% de la construcción ha sido excavada, por lo que sólo se puede especular acerca de lo que se esconde bajo la arena.
Compuesta por construcciones de barro de planta circular y comunicadas entre sí por intrincadas vías de circulación. Este asentamiento fue escenario, entre el siglo IV antes de Cristo y el II de la era cristiana, de una vida basada en la agricultura del maíz, la cría de camélidos para la alimentación y el vestuario, el trabajo de la piedra y la alfarería. Servía, además, para el intercambio de bienes entre el interior y la costa.